MONÓLOGOS EN FIESTAS PRIVADAS

Prácticamente cualquier sitio o celebración es buena para hacer un monólogo de humor.

Prácticamente en cualquier lugar y en cualquier tipo de celebración o acontecimiento, se puede hacer un monólogo de humor.

De hecho yo ya voy ampliando cada vez más el abanico de eventos donde hago los monólogos.

Hace unos años, nunca habría pensado que llegaría a hacer monólogos de humor en comuniones. Y ahora ya llevo varios monólogos en comuniones donde mientras los niños se quedan con animadores infantiles, los adultos disfrutan del monólogo. Ha habido veces que los niños se han quedado a ver la actuación por lo que ha habido que hacer un monólogo más «light». 

Otro tipo de evento que estoy haciendo últimamente y que me está sorprendiendo cómo está saliendo, son los monólogos para gente mayor, gente de entre 65 y 90 años que disfruta de un monólogo de humor como si fueran adolescentes. Sí que es verdad que en estos monólogos hay que cambiar bastante los temas a tratar e incluso el tipo de espectáculo donde intento añadir algo de magia e improvisación. Uno tiene que adaptarse al público que tiene delante. De momento voy disfrutando de estos monólogos para amas de casa y asociaciones culturales donde la media de edad suele ser bastante alta al igual que su sentido del humor.

Las demás fiestas privadas donde hago los monólogos, suelen ser las típicas y en las que más tiempo llevo haciendo los monólogos. Vamos lo típico, monólogos en bodas, en despedidas de soltero o soltera, monólogos en cenas o comidas de empresa, monólogos encumpleaños o simplemente un monólogo de humor porque a alguien le apetecía celebrar algo.